martes, noviembre 25, 2008

Fragmentos

Ya no hay respuestas,
sólo lluvia en el umbral
resbaladizas pendientes,
nada para dar...
es pretencioso,
querer verme como me ves
nacer de repente, nuevo, diferente.

Tus filos me han cortado, soy fragmentos,
estrechos fragmentos que huyen río abajo

Es ancho el cielo en que anida tu silencio,
y yo ignorante, teniéndolo todo,
no sé como alzar vuelo.

LO NUEVO

¿Por qué siempre me perseguirá esta compulsión?
De nuevo aqui,
Intento hacer el mundo familiar, vuelvo a lo conocido
doblo el eje del tiempo para curvarlo
lo transformo en circular.
Ahora los instantes se repiten mecánicamente,
como una carcajada.

Y aquí estoy de nuevo.
parado en el mismo sitio de siempre,
el mismo semblante
intentando lo imposible: que nada cambie.

Porque uno siempre vuelve a donde fue feliz,
o donde creyó serlo
o donde creyó ser algo,
aunque sea nimio, insignificante.
repetimos nuestra "insignificanteza".

Es por eso que, aunque el mundo cambie,
nos obstinamos en recrearlo idéntico a sí mismo
así se torna seguro, predecible... rutinario... chato....
pero eso es lo de menos,
estamos en un ambiente familiar,
no tenemos que adaptarnos a "lo nuevo"
podemos seguir hasta que el tiempo se nos acabe,
y "lo nuevo" se haya perdido para siempre.