"Esta por finalizar el estudio de campo más prolongado y complejo que se ha realizado hasta ahora sobre el reino animal (...) Un equipo de científicos de la Universidad de Alaska han estado observando diez años durante dieciséis horas diarias a una manada de Ursus Arktos de la comunidad de Osos Pardos de Park Cheek; los investigadores han podido comprobar que cuando juega, cada oso tiene algo único y original, casi podría decirse que tiene una personalidad particular. Cuando están el libertad estos animales hacen mucho más que sobrevivir.(...) Cada uno tiene una característica, puede distinguirse por su vivacidad, curiosidad, por ser irascible u hostil, o por confiado y juguetón. En un típico día de verano los osos juegan alrededor del quince por ciento de la jornada, para los osos jugar es una parte importante de la vida, aún en la adultez."
Diario La Nación, marzo 1992
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